Conoce más la historia de Adobe: el titán de la creatividad
En el mercado actual, sea tecnológico, industrial o científico, las empresas con mayores ventas son casi siempre las favoritas de los clientes. Por lo anterior, las empresas pequeñas que estudian sus mercados siempre están a la búsqueda de oportunidades para posicionarse al lado de los peces gordos y de alguna manera convertirse en su competencia directa. En este artículo te contaremos más sobre la historia de Adobe: el titán de la creatividad.
Hoy en día, la competencia por ser el mejor de un mercado es más intensa que nunca, y aquellos que están en la cima deben implementar medidas para seguir siendo competentes además de sobrevivir ante las exigencias que presentan los clientes y el mercado como tal.
Simultáneamente, los usuarios ponen a prueba a las grandes empresas, con su búsqueda constante del producto más innovador, más atractivo o más útil. Aquí es donde las estrategias de negocio y ventas se ven reflejadas.
Nacimiento y crecimiento de un titán
Adobe, como sus creadores John Warnock y Charles Geschke decidieron nombrarla, tuvo un éxito rotundo desde sus inicios y logró incluso el interés del difunto Steve Jobs quien intentó comprar la compañía, oferta que los socios declinaron pues eran conscientes del gran potencial que tenía la empresa.
Varias empresas han logrado competir con Adobe, pero poco a poco la compañía las ha absorbido, al punto de borrarlas del mercado.
En el año 1994 Adobe adquirió Aldus, una empresa desarrolladora de software famosa por haber creado la aplicación ”Pagemaker”, una herramienta de maquetación que a su vez competía con otro grande del mercado llamado “QuarkXPress”, lanzado años atrás.
En esa década, Adobe absorbe totalmente a Aldus y toma las bases de desarrollo y otras herramientas de Pagemaker para presentar su reconocida aplicación InDesign, que continúa siendo uno de las grandes aplicaciones para elaborar diseños editoriales o campañas de prensa, gracias a su entorno de trabajo fluido y a un sin fin de posibilidades que dejan todo a la creatividad.
Adobe en el siglo XXI, más allá del diseño
En el año 2003 Adobe compró a Syntrillium Software desarrolladora del programa “Cool Edit Pro” y lo mejoró en su versión de Adobe Audition, uno de los editores de audio más completos que hay en el mercado.
En el 2005 Adobe realiza una de las adquisiciones más cuestionadas por los usuarios, pero que al final se transformaría en una gran inversión. Estamos hablando de Macromedia, una reconocida empresa de software distribuidora de programas como Flash, Dreamweaver, Director, Fireworks, y Freehand, entre otros, por la que pagó 3.400 millones de dólares.
La estrategia de Adobe al comprar Macromedia era lograr una mayor compatibilidad entre productos, por ejemplo, los archivos PDF y las animaciones realizadas en Flash.
Adobe System Incorporated se encontraba entonces en el top del mercado, debido a su participación en diferentes sectores creativos como la edición audiovisual, el diseño digital y el diseño impreso, entre otros.
Gracias a la influencia que tenía entre los usuarios, Adobe se había convertido en la empresa desarrolladora de software para diseño más importante del momento y competir contra ella podía llegar a considerarse una completa locura.
El presente, servicios en la nube y más…
Pocos años después, la compañía lanza al mercado su reconocida Adobe Creative Suite, la cual es un conjunto de aplicaciones dirigidas a los usuarios con diferentes necesidades como lo son la pre y postproducción de proyectos audiovisuales.
Este grupo de aplicaciones nace de la idea de unir todos los programas que anteriormente había desarrollado Adobe y agruparlos en un cómodo paquete el cual se dividía en distintas categorías dependiendo de sus herramientas.
En el 2013, este conjunto de programas pasó de llamarse Adobe Creative Suite a convertirse en Adobe Creative Cloud. Continuaba siendo un paquete de aplicaciones pero con la diferencia de trasladarse a un entorno virtual conocido como la nube, en donde sólo se podía acceder por medio de una suscripción.
Es en este punto es donde la situación empieza a cambiar un poco, debido a que muchos usuarios no podían acceder a la suite, pues estas suscripciones llegaban a ser bastante costosas, por lo tanto, para un diseñador promedio en mercados emergentes llegaban a ser algo inaccesibles.
Además, actualización tras actualización era notorio que el peso de los programas aumentaba. Muchas de las herramientas que añadían llegaban a ser irrelevantes ya que fueron pensadas para tareas demasiado específicas que finalmente no eran de uso común.
Sobre Affinity Designer
Por lo anterior, en el año 2015, un grupo de desarrolladores de software de los que no se sabía mucho, decidió trabajar en un proyecto para el mercado del diseño el cual denominaron Affinity Designer, una herramienta con altas expectativas y con cualidades que podía “competir” con lo que en ese momento era Adobe.
Las primeras versiones de Affinity Designer estaban enfocadas al diseño vectorial y directamente se creó una rivalidad con Adobe Illustrator.
Unos meses más tarde presentan el Affinity Photo y el Affinity Publisher, competidores de Adobe Photoshop y Adobe Indesign. Dichos programas presentaron ventajas como el peso total del software una vez instalado, el reducido uso de recursos al ejecutar las aplicaciones y su suscripción anual de 39 euros (muy por debajo del precio de Adobe), entre otros beneficios.
Por ello, algunos usuarios se han dando la oportunidad de realizarle un test a este software y los buenos resultados no se han hecho esperar.
Para concluir, no es sencillo ser rival de Adobe, una compañía con tanta historia y reconocimiento mundial, no sólo por sus desarrollos sino por lo que ha logrado durante tantos años. Pero para mantenerse a flote, Adobe debe hacer propuestas frescas, que en en realidad cumplan las necesidades de los usuarios pues son ellos finalmente quienes hacen uso de los productos y tienen la posibilidad de elegir al mejor postor.